Desde la Federación Masónica Internacional Le Droit Humain recibimos con gran alegría la aprobación de la Ley sobre la Memoria Democrática que supone un gran avance en el camino hacia la verdad, justicia, reparación de las víctimas que luchado por los valores de la divisa Libertad, Igualdad y Fraternidad que han sido el motor de los avances democráticos de estos últimos 200 años.

En esta esperada Ley, se reconoce que fueron víctimas “las personas que sufrieron persecución o violencia por razón de conciencia o creencias religiosas, así como aquellas o a las sociedades teosóficas y similares” (art 3.1.l). Y considera ilegítimos las condenas y sanciones y la ilegalidad e ilegitimidad del Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo, el Tribunal de Orden Público “por ser contrarios a Derecho y vulnerar las más elementales exigencias del derecho a un juicio justo, así como la concurrencia en estos procesos de intimidación e indefensión” (art 5.2).

Confiamos que esta nueva normativa permita conocer y valorar de forma ecuánime y correcta acciones como las desarrolladas en la masonería, que se ha visto a lo largo de la vida contemporánea española denostada y vilipendiada, cuando nuestra labor fue, es y será trabajar por el beneficio y la mejora de la Humanidad y por una sociedad más justa e igualitaria.

Nos congratulamos que en esta Ley se haya tenido en cuenta a nuestros Hermanos y Hermanas que fueron represaliadas o perseguidas por pertenecer a cualquier Orden Masónica. Especialmente en lo relacionado con la declaración de ilegalidad e ilegitimidad de las dolorosas sentencias e investigaciones que fueron realizadas por el Tribunal Especial para la Represión de la Masonería y el Comunismo, brazo ejecutor de la represión durante el franquismo.

Deseamos que el futuro pueda esclarecer y restablecer el valor de las personas que, desde la masonería, han luchado para que nuestra España fuera una nación de concordia, justicia y libertad.