De donde venimos

De donde venimos

El 14 de enero de 1882 la Logia “Los librepensadores” de Pecq incia a una mujer, María Deraismes, que dedicó su vida a la lucha por la emancipación femenina y creó, junto a León Richer, la Societé pour la revendication des droits de la femme. No será hasta el 4 de abril de 1893 cuando junto con el Hermano Georges Martin, funda la Gran Logia Escocesa “El Derecho Humano”. En 1896 esta logia adquiere el estatuto de Obediencia, y en 1901, el de Orden Masónica Mixta Internacional. En 1920, nuestra Orden adquiere, con la constitución internacional, sus reglas definitivas que son adecuadas y modificadas, cada cinco años, en una asamblea que reúne a todas sus federaciones.

En 1928 nace la Federación Española que tuvo como Representantes del Supremo Consejo a los hermanos Manuel Treviño, Julio Garijo y Mateo Hernández Barroso. Tuvo logias en Madrid, Barcelona, Almería, Murcia y Bilbao. En 1936 partió al exilio, volviendo en 1976 con la logia “La Luz vuelve” al oriente de Irún Fuenterrabía. En 1982 se refunda la Federación por las logias “Ferrer i Guardia” de Barcelona, “El Alba de Levante” de Valencia y “Libertad” de Madrid.

La Orden Masónica Mixta Internacional “El Derecho Humano” se diferencia de otros componentes del paisaje masónico por una especificidad materializada en tres puntos: La plena igualdad en su seno de la mujer y el hombre, la continuidad iniciática del 1º al 33º del Rito escocés y la presencia en 56 países, la internacionalidad.

INTERNACIONAL

La cuestión del origen de la Masonería es algo compleja, pudiendo incluir varias contestaciones. Se dan unos orígenes míticos o simbólicos tanto en la organización de los Iniciados Egipcios, de los constructores del Templo de Salomón en Jerusalén, de los Misterios de Eleusis, etc. Aparte de estas teorías, solo se puede asegurar históricamente que la Masonería actual surge de las ideas de la Ilustración, el Humanismo y el Arte Real practicado por los constructores medievales.

El simbolismo del obrero libre en un mundo dominado por el criterio feudal del vasallaje era algo más que el material, simbolizaba el compromiso que cada participe de la obra aceptaba mediante la reflexión personal. De esta manera, mientras los Iniciados eran conscientes del significado profundo de palabras y símbolos, el mundo en el que se movían solía quedarse sólo con el aspecto externo de la cuestión. Para explicar mejor esta diferencia nos sirve el ejemplo de los alquimistas: estos afirmaban poder convertir el plomo en oro mediante una maravillosa piedra que decían poseer, la piedra filosofal. Mientras que la sociedad solía entender esta piedra como algo real y mágico, los Iniciados simbolizaban con ella la Sabiduría, capaz de transformar la energía humana básica en fuerza constructiva, tanto en lo espiritual como en lo material.

El arte de construir grandes obras inició un decaimiento progresivo, y al inicio del siglo XVIII apenas permanece un sentido de labor filosófica y de ayuda mutua entre los francmasones.

El 24 de junio de 1717 se reúnen unos masones de Londres para formar la primera gran logia. Se puede decir que la primera división en Masonería nace en el mismo instante que se creó el primer gran cuerpo masónico, la Gran Logia de Londres. A esta, calificada por sus detractores como de los Modernos, al poco tiempo se le opuso otra Gran Logia, autodenominada de los Antiguos, que proclamaba que ellos eran los que realizaban la verdadera y “antigua” Masonería. Los Modernos y Antiguos crearon las dos líneas simbólicas de las cuales parten la mayoría de los ritos actuales en Europa. De los Modernos parte el Rito Francés, el Rito Escocés Rectificado y el Rito de Memphis Misraim; de los Antiguos, el Escocés, York y Emulación (nacido éste tras la fusión en 1814 de las Grandes Logias de los Antiguos y Modernos como pretendida unión de las dos líneas surgidas en 1717).

Años más tarde, al entrar la civilización en la era positivista, vendría otra gran bifurcación en el árbol que es la Masonería, tras la decisión del Gran Oriente de Bélgica, y luego del francés, de abolir la obligatoriedad de abrir los trabajos masónicos a la gloria del Gran Arquitecto del Universo. Esta fractura ha supuesto el alejamiento de la Masonería anglosajona con una parte de la de Europa Continental y es la que divide, actualmente la Masonería entre Regulares (ortodoxos) y Liberales (adogmáticos).

La tercera y última ramificación vivida en la Masonería la protagonizó la Orden Masónica Mixta Internacional El Derecho Humano, desde el momento de su creación en 1893 instaurando la igualdad de los dos sexos, permitiendo así la convivencia de hombres y mujeres en logia, dando pie a la creación de logias mixtas.

ESPAÑOLA

El establecimiento de nuestra Orden en España comienza en 1915, con la creación de un triángulo en Madrid con el nombre de San Albano. El principal promotor en aquella época fue Manuel Treviño, distinguido egiptólogo y teósofo, que con el apoyo de hermanos del Gran Oriente Español extiende la Masonería Mixta por España.

En 1928, la primera Jurisdicción Española del Derecho Humano cuenta con cinco logias: “San Albano” en Madrid, “Luz” en Almería, “Compte de Saint-Germain” en Barcelona, “Hermes” en Málaga y “Zanoni” en Sevilla. Asimismo, la integran un triángulo en Bilbao llamado “Fénix” y un capitulo Rosacruz llamado “Esperanza”.

Una vez superada las dictaduras de Primo de Rivera y de Berenguer, El Derecho Humano se asienta, contando como representante del Supremo Consejo Mixto con Mateo Hernández Barroso, proveniente del Gran Oriente Español. Hernández Barroso fue director general de Comunicaciones y Telégrafos durante la Segunda República siendo un cercano colaborador de Diego Martínez Barrios. Durante la Guerra Civil y antes de partir al exilio en México colaboró con la Jurisdicción Sur del Supremo Consejo del grado 33 de los EE. UU., el Gran Oriente de Francia, la Gran Logia de Francia y la Federación francesa de El Derecho Humano en la evacuación de los hermanos y hermanas españoles. Él mantendrá su cargo en el exilio hasta su muerte en 1963, siendo además Gran Maestre del Gran Oriente Español en el exilio, ostentando así un cargo en la masonería masculina y en la mixta a la vez.

La Masonería Mixta en España no retorna hasta que, cercana la muerte del general Franco, la Federación Francesa funda la logia “La Luz vuelve” al oriente de Irún-Fuenterrabía en el año 1974, aunque esta logia no tiene continuidad. No es hasta el 24 de junio de 1978 cuando algunos hermanos y hermanas apoyados por miembros del G. O. E. fundan en Barcelona la logia “Ferrer i Guardia” que será la logia pionera del Derecho Humano en esta nueva etapa. Posteriormente se fundaron en 1979 “El Alba de Levante” al oriente de Valencia, y “Libertad” al oriente de Madrid en 1980, dando paso el 23 de marzo de 1981 a la creación entre estas tres logias, tras un intento de crear junto con “Fraternidade” al oriente de Oporto una Jurisdicción Ibérica, la nueva Jurisdicción Española.

En los años ochenta se crearon el capítulo rosacruz “El Fénix”, la logia de perfeccionamiento “La Escuadra de Plata” y varias logias azules, entre ellas “La llum de la Terra” al oriente de Gerona, “Harmonía” al oriente de Barcelona, “Perseverancia” al oriente de Miami-Platja, Tarragona, lo que permitió constituir la Federación española. A principios de los 90 se mantienen en la Orden solo “El Nivel”, “Libertad”, “Igualdad” y “Alba de Levante”. Estas cuatro logias pasaron a Jurisdicción, supervisadas por Danièle Juette, que en 2007 sería elegida Gran Maestre de la Orden, acompañados por la logia “Constancia”, que se sumó a las filas de El Derecho Humano. De esta logia proviene el que será el primer presidente de la nueva jurisdicción, Antonio Ceruelo, que fue elegido en el Convento Internacional de 2007 Gran Maestre Adjunto de la Orden. Al poco se encenderían las luces de “Caballeros de la Noche” en Zaragoza (proveniente de la G.L.Federal) y “Obradoiro” en Vigo. Ya siendo Antonio Ceruelo Gran Comendador de la nueva Federación se crean las logias “Gran Trígono” en Murcia, “Progreso” en Oviedo, la logia de perfeccionamiento “Prudencia” en Zaragoza, el areópago “Ramón Llull”, la logia sevillana “Luz de Al-Andalus” y el triángulo de grado 33 “Unión”.